Es un preparado que consiste en embutir una tripa (intestinos) con carne picada o sangre cocida de animal, además de otros ingredientes y condimentos. El chorizo, el salchichón o el lomo han estado en nuestros bocadillos desde que en el recreo los compartíamos con les compañeres.

¿Pero qué hay detrás de este preparado, para algunos apetitoso? Cuándo pienso en embutido me vienen a la mente las granjas porcinas. La realidad es muy distinta de lo que nos presentan en la publicidad. La ausencia de información por parte de las industrias nos hace imposible tomar decisiones informadas sobre si comer o no animales.

Documentales como Containers o Factoría retratan la cruda realidad que se vive dentro de los mataderos. Es conocida en el mundo vegano la cita de Sir Paul McCartney:

Si los mataderos tuvieran muros de cristal, todes seríamos vegetarianes

Entre las prácticas habituales en las granjas, todas ellas amparadas por la legislación europea, existen las siguientes: hacinamiento, condiciones extremas de calor, confinamiento, mutilación de dientes y rabo y castración sin anestesia en cochinillos al nacer, ceba en jaulas que imposibilitan el movimiento, continua inseminación artificial forzada, separación de bebés de sus madres y selección genética eugenista que provoca embarazos con el doble de crías habitual en condiciones normales. 

Las condiciones en las que viven los cerdos en granjas provoca terribles enfermedades y malformaciones que no son siempre tratadas. Si este es el caso, los cerdos son atiborrados de antibióticos para que sigan vivos, pero solo por un fin económico y no por el bienestar del animal. Otros muchos mueren y sus compañeros deben convivir con los cadáveres.

Por desgracia, estos animales solo ven la luz del sol y respiran aire fresco antes de ser conducidos al matadero, donde serán asfixiados en cámaras de CO2 o electrocutados, antes de ser degollados, en ocasiones aún conscientes. Pueden oler el miedo, oír los gritos de sus compañeros y se revuelven como locos intentando huir de su inevitable y duro final. Les partidaries del carnismo se apoyan en que sus prácticas se consideran matanza sin dolor, pero no existe tal cosa cuando la víctima no desea morir. 

La esperanza de vida de un cerdo es de 10 a 15 años, pero en las granjas son asesinados antes del año si son cochinos (cerdos cebados para la matanza. Si son cerdas, cuando no puedan reproducirse más. Un total de 28 millones de cerdos son asesinados cada año en España (PACMA).