Mamma Green

Alternativas vegetales

Yogur y postres

Cómo se hace el yogur

El yogur se obtiene a partir de un producto lácteo (de origen animal) y un proceso de fermentación. Fue inventado hace muchos años por los turcos o los búlgaros, no se sabe muy bien, ya que ambos alegan haberlo descubierto. 

¿Y cómo se hace el yogur vegano? Se utiliza el mismo proceso, insertando bacterias benignas para que fermenten, pero en este caso, con leche vegetal. Si se usan leches más líquidas como las procedentes de cereales, avena o arroz, pueden incluir espesantes como goma guar, almidón o carragenato.

Si quieres saber más sobre cómo se obtiene la leche de animales pincha aquí.

A pesar de que el yogur no sea mi postre predilecto, ni siquiera cuando no era vegan, suelo tenerlos en mi nevera para cocinar recetas dulces. Si en tu caso lo echas de menos una vez que te hagas vegan debes saber que hay una amplia variedad de opciones vegetales a tu disposición.

Las ventajas que nos proporciona el postre vegetal frente a su versión láctea son, más allá de evitar el maltrato animal y el daño al medio ambiente, una menor concentración de azúcares, por lo general, y que no contiene grasas que contribuyan a aumentar el colesterol.

Los yogures, gracias a los fermentos que contienen, ayudan a nuestra salud intestinal. Los probióticos favorecen a nuestras bacterias y mejoran nuestra digestión. 

Podemos encontrar yogures y postres hechos con una amplia variedad de leches vegetales: anacardos (ingrediente habitual en la preparación de quesos), leche de coco que añade cremosidad, leche de avena o de almendra e incluso pipas de girasol o semillas de lino. Algunos también van enriquecidos con B12 y calcio, al igual que la leche vegetal.

El yogur sin azúcar podemos filtrarlo y hacer queso de untar.

Arroz con Horchata de Reina

Avellana y Almendra de Sojasun

Gama Begetal de Kaiku

Anuncio de yogur líquido Alpro

Qué opciones hay

El que no es vegan es porque no quiere, ya que la oferta es más que generosa.

Yogures de sabores como lima, mandarina, frambuesa, coco, melocotón, higo, arándano o mango; con trozos de fruta; de vainilla, chocolate o caramelo; altos en proteína, griego, kéfir, para reducir el colesterol o incluso skyr*.

La mayor parte de las grandes cadenas de supermercados ya tienen, desde hace años, su propia marca de yogures vegetales de sabor a fruta, chocolate o vainilla para les más goloses.

Las marcas líderes en el mercado vegano tienen sus propias gamas. Las más populares son Sojade y Sojasun del mismo grupoAlproNatur Green, Provamel y Abbot Kinney’s. Podréis encontrar la mayoría en herbolarios y algunas grandes superficies. 

La gran Danone también ha querido lanzar su propia línea de lácteos vegetales. Bajo la marca Savia, lanzó hace unos años su primer yogur vegetal. Más recientemente, ha presentado Activia 100% vegetal. Parece que solo se puede comprar en algunas tiendas y no lo promocionan en su web española. Quizá no esté teniendo éxito y lo vayan a retirar.

Por su parte, la marca de postres Reina ha lanzado al mercado Reina Vegetal con sabores que van desde el albaricoque o la grosella, pasando por el chocolate hasta plátano, coco y café.

Si somos goloses y queremos un postre más dulce todavía, podemos optar por el Sojasun de Praliné, mi preferido. También podemos hacer nuestras propias natillas en casa con leche vegetal. Yo las hago con leche de avellana, un poco de chocolate y una galleta por encima. Son muy fáciles de elaborar y solo debemos seguir las instrucciones del preparado para natillas

El arroz con leche de horchata de Reina, aunque aún no lo he probado, me causa curiosidad. Anímate a preparar arroz con leche en casa con nuestra receta. 

El flan de vainilla o los petit suisse de Sojasun, también están muy ricos. De igual forma, puedes utilizar el preparado de las natillas para hacer flan usando la mitad de leche.

Si te gustan las gelatinas de sabores debes saber primero de dónde provienen. Lee más sobre este tema en nuestro artículo sobre las golosinas

* El skyr es un producto lácteo típico de Islandia. Tiene una consistencia parecida al yogur griego, pero un sabor más suave.